Casa de labranza edificada a finales del siglo XVIII, ha sido rehabilitada para el hospedaje de aquellos que quieran disfrutar de un entorno rural en una pequeña pedanía de apenas 50 habitantes. Contamos con una bodega familiar donde se sigue realizando vino de forma tradicional, patios y corrales en los que habitan gallinas, ocas, patos, pavos reales, gatos y perros que ofrecen un recuerdo del pasado. Si hay algo que da encanto es la tranquilidad, el aire puro y el contacto con la naturaleza. Pudiendo además disfrutar de la gastronomía típica de la Manchuela.

La casa pertenece a nuestros antepasados y en un esfuerzo de compartir nuestras tradiciones con otras personas decidimos restaurarla y abrirla al público. La satisfacción de aquellos que nos visitan y recuerdan su infancia en los pueblos de sus padres y abuelos es una de las mayores motivaciones que nos hace seguir dando la bienvenida a todos aquellos que estén interesados en un viaje por el recuerdo de la España interior.

Al ser un pequeño pueblo existe una inmersión total en el dia a dia de la vida en el campo, con largos paseos por los caminos agrícolas y pinares cercanos. Entre los lugares aledaños de mas interés se encuentra: Villanueva de la Jara con su majestuosa Basílica de la Asunción, el Convento de las Carmelitas descalzas, la Plaza Mayor del Ayuntamiento, etc. Alarcon, villa medieval que alberga el Mirador de la Peña, el Pantano, Parador, Palacio de los Gosálvez, Torre de Armas, el puente de Tebar y el inicio del sendero de la Hoz de Alarcón. San Clemente y su conjunto Histórico-Artístico y Museos. Enguidanos una localidad con numerosos paisajes espectaculares como Las Chorreras del Cabriel de aguas refrescantes y cristalinas, La Playeta y el Castillo